En esta entrada mostramos el que quizás sera el retablo de Ánimas más desconocido y -nos atrevemos a decir- el más bonito de los que conservamos en Rute. Se trata del que se encuentra en la ermita de Ntra. Sra. de la Soledad, en las inmediaciones del cementerio parroquial de San Cristóbal.
La escena representa a la Virgen del Carmen sentada sobre una nube con el Niño Jesús en su rodilla izquierda. Con la mano derecha ofrece a los fieles difuntos el Santo Escapulario. Dos ángeles se disponen a elevar a las almas al cielo mientras las personas que arden en las llamas del Purgatorio vienen a decirnos que ante la muerte todos somos iguales. En ellas vemos a personas normales pero también a un obispo, ya que todos somos pecadores y tenemos que redimir nuestras culpas antes de gozar del Cielo. Este recurso artístico ha sido muy utilizado en el arte español durante bastantes centurias e ilustra de manera perfecta este concepto. Este relieve está muy bien ejecutado y es de bastante buena calidad.
La escena se aloja en un marco de madera escoltado por sendas columnas y rematado por un frontón. El conjunto se levanta sobre una repisa, que también ofrece un estilo clásico al igual que el resto de elementos que lo componen.
1 comentario:
Es cierto, personalmente me ha gustado, es curioso lo del obispo.
La jerarquia de la iglesia y el clero, tendrian a menudo que bajar de su pedestal y ponerse a la altura de nosotros pecadores.
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