Solo parándonos a contemplar la cabecera de
nuestro blog, en el cual aparece nuestra Madre recién salida de su Santuario y
Barrancos abajo, ya nos podemos ir haciendo a la idea de que, por fin, el año
ha pasado y nos disponemos a contemplar una vez más a la Reina y Señora de Rute en la
calle.
Como han citado muchos pregoneros de Nuestra
Patrona años atrás, nos disponemos a vivir el instante en el cual, Nuestra
Carmelita, coge su barco (trono) desde el muelle de los Barrancos, y se dispone
a navegar entre el mar de olivos de la que es Reina, como muy bien explicita
con su sonido la marcha procesional “REINA ENTRE OLIVARES”.
Con el paso de los años, el momento de los
BARRANCOS se ha convertido en un momento sublime, que constituye un antes y un
después en el calendario anual de Rute. Calendario al cual, con su salida, la Virgen del Carmen da un
vuelco, inclinándolo irremediable y frenéticamente hacia el día del Carmen, el
día más grande de Rute jamás contado.
Bendita estampa de NUESTRA PATRONA, la que un
año más nos espera bajando Los Barrancos al son de “Reina y Señora”,
balanceando su Santo Escapulario en forma de bendiciones, colmando así la
impaciencia y la inquietud de los carmelitanos ruteños que han esperado un año
más para probar la exquisitez de ese dulcísimo momento de
gloria.
Ahora, con más fuerza si cabe, pidamos a la Virgen que ese dulcísimo
momento que Ella nos brinda en los Barrancos sirva, en el comienzo de la
andadura del camino hacia su Coronación, para tener un Rute fuerte, UNIDO,
MARIANO, CARITATIVO Y QUE PRESUMA COMO NADIE EN LA PROVINCIA, DE AMAR COMO
NADIE A LA MADRE DE
DIOS.
TENEMOS SUERTE DE
SER RUTEÑOS, APROVECHÉMOSLO. DISFRUTEMOS DE LA VIRGEN DEL CARMEN: LA VERDADERA “DELICATESSEN”
QUE EL ALTÍSIMO HA PUESTO PARA SIEMPRE EN NUESTRO PUEBLO.
¡VIVA LA VIRGEN DEL CARMEN!
¡VIVA LA PATRONA DE RUTE!
¡VIVA LA MADRE DE DIOS!
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